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Contexto - Los productos de consumo, como detergentes y productos de limpieza, productos cosméticos, de aromaterapia y productos herbolarios utilizan más de 2.500 ingredientes de fragancia distintos. Estos pueden proceder de fuentes naturales o de síntesis químicas.
Se calcula que entre el 1 y el 3% de la población europea es alérgica a alguno de estos ingredientes de fragancia. En la UE, desde 2003, es obligatorio indicar en la etiqueta de los productos de consumo la presencia de cualquiera de los 26 ingredientes de fragancia identificados como alergénicos, algo importante para los consumidores sensibles a estos alérgenos.
En la actualidad, se ha identificado una nueva serie de ingredientes alergénicos.
Cuando entran en contacto con la piel, algunos ingredientes de fragancia pueden producir irritaciones, que generalmente se manifiestan mediante enrojecimiento de la piel o erupciones. También puede producir una reacción alérgica más grave, denominada eczema, ocasionada por una respuesta del sistema inmunológico. Una vez se desencadena una alergia por un primer contacto con un ingrediente alergénico, se trata de una condición de por vida, que reaparece siempre que la persona vuelve a exponerse a la misma sustancia. La reacción depende de la persona afectada, la naturaleza del ingrediente y la cantidad utilizada, que puede ser muy pequeña. Algunos ingredientes de fragancia no provocan reacciones alérgicas por sí mismos, pero se pueden transformar químicamente en la piel con la presencia de aire, luz solar, o incluso por reacciones bioquímicas en el interior del cuerpo, y estas formas modificadas pueden entonces provocar reacciones alérgicas.
Desde que se identificaron los primeros 26 alérgenos de fragancia, se han detectado otras sustancias de fragancia que desencadenan reacciones alérgicas. Basándose en los informes disponibles y en varios casos de alergia presentados por dermatólogos, el Comité Científico europeo de Seguridad de los Cosumidoress (CCSC) identificó 82 sustancias (54 productos químicos y 28 extractos naturales) que pueden clasificarse como “alérgenos de contacto establecidos” en seres humanos, incluidos los 26 que ya estaban en la lista. A partir de los resultados combinados de experimentos con animales y el análisis de su estructura química, otras 26 sustancias químicas individuales se clasificaron como “alérgenos de contacto probables”. Además, también se clasificaron 35 sustancias químicas individuales y 13 extractos naturales como “alérgenos de contacto posibles”. Otras tres sustancias específicas fueron reconocidas como “alérgenos potentes” y no se consideran seguras en productos de consumo. El CCSC recomienda que estos ingredientes, así como los que podrían “activarse” y convertirse en sustancias alergénicas deben añadirse a la lista de ingredientes alergénicos de cuya presencia en productos cosméticos se debe informar a los consumidores.
Para algunas sustancias demostradamente causantes de un elevado número de alergias, la opinión del Comité Científico es que, si no se pueden establecer umbrales para el uso seguro de los ingredientes y extractos naturales que son motivo de preocupación, un nivel de exposición en productos cosméticos del 0,01% o inferior (o 10 mg/100 g de producto cosmético) evitaría las reacciones alérgicas en la mayoría de los casos. El CCSC también determinó medidas de prevención primarias y secundarias, desde la prohibición a la información, que podrían limitar o eliminar la exposición a alérgenos de fragancia.
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